miércoles, 26 de septiembre de 2012
viernes, 9 de abril de 2010
Confeciones I
En la carta de mi mente te escribí una súplica.
La ferviente oración de quien necesita una mirada al alma.
Por que se bien que me escuchas, aun mis confesiones malas
las tratas.
Te escribí en mis palabras mentales lo que estaba ansiosa de decirte
Sin pronunciar las palabras que estorbaran mis frases.
No callé absolutamente nada y ni la mordaza me impidió ser confesa.
Mas la mirada de mi pecado no detuve
Porque no encontré el cielo para contenerlo.
La ferviente oración de quien necesita una mirada al alma.
Por que se bien que me escuchas, aun mis confesiones malas
las tratas.
Te escribí en mis palabras mentales lo que estaba ansiosa de decirte
Sin pronunciar las palabras que estorbaran mis frases.
No callé absolutamente nada y ni la mordaza me impidió ser confesa.
Mas la mirada de mi pecado no detuve
Porque no encontré el cielo para contenerlo.
Wings I
Quedarse en la memoria del olvido
para suspirar por un recuerdo, no vivido.
Atarse al viento o echar raíces en el cielo.
Ese es el juego, es el reto.
Una suerte de andariego sin camino.
¿Quién soy?
El papel certificado que me nombra,
o la cifra en decimales que me cuenta.
¿Quién habita en mi silueta?
¿Y cómo puedo ser auténtica si conozco tan poco de mí?
¿Son un eco mis palabras y espejismos mis ideales?
¿Heredados son mis miedos y mis temores costumbre?
Todo cabe en el vacío
Todo grita en el silencio.
Sí como abajo es arriba¿De qué me escondo?
Si en los aros de Saturno y en las praderas marcianas
no hay un rescoldo, que no arda en mi corazón.
Ser el todo de esa nada me reduce a lo inmortal.
Pero heme aquí, comiendo la miseria de mis uñas.
A la ofensiva, en esta guerra inútil conmigo misma.
para suspirar por un recuerdo, no vivido.
Atarse al viento o echar raíces en el cielo.
Ese es el juego, es el reto.
Una suerte de andariego sin camino.
¿Quién soy?
El papel certificado que me nombra,
o la cifra en decimales que me cuenta.
¿Quién habita en mi silueta?
¿Y cómo puedo ser auténtica si conozco tan poco de mí?
¿Son un eco mis palabras y espejismos mis ideales?
¿Heredados son mis miedos y mis temores costumbre?
Todo cabe en el vacío
Todo grita en el silencio.
Sí como abajo es arriba¿De qué me escondo?
Si en los aros de Saturno y en las praderas marcianas
no hay un rescoldo, que no arda en mi corazón.
Ser el todo de esa nada me reduce a lo inmortal.
Pero heme aquí, comiendo la miseria de mis uñas.
A la ofensiva, en esta guerra inútil conmigo misma.
martes, 7 de julio de 2009
Señorita Demasiado V
Arte: Humberto Hernández
Modelo : Funiculí Funiculá
Nunca esperes demasiado de mí. Es lo más cómodo y nadie saldrá defraudado,no me quedan colores para pintarte una vida y esta noche tampoco veremos estrellas fugaces...Y no insistas. No puedo saltar cuando todos miran o distinguir unas flores de otras. No esperes demasiado de mí. Te harías daño
Modelo : Funiculí Funiculá
Nunca esperes demasiado de mí. Es lo más cómodo y nadie saldrá defraudado,no me quedan colores para pintarte una vida y esta noche tampoco veremos estrellas fugaces...Y no insistas. No puedo saltar cuando todos miran o distinguir unas flores de otras. No esperes demasiado de mí. Te harías daño
lunes, 29 de junio de 2009
Señorita Demasiado IV
Arte: Humberto Hernández
Modelo: Funiculí Funiculá
Tiene dos ojos para no perder detalle de lo que pierde. Tiene el pelo corto y la certeza de que se le escapan los trenes que la puedan llevar lejos de sí. Tiene un pinchazo de dolor por cada espina que se ha clavado, y la sensación de soledad anclada en los tobillos. Tiene amigas (eso dice) en las que no confía, y tiene soldados (eso olvida) que se preocupan por ella hasta cuando ella misma se despreocupa. Tiene sueños, labios, ideas, dedos, luces, nariz, sombras, canciones, alma, tristeza, talento y cuello. Y no se da cuenta del misterio que supone adentrarse en ella atreverse a descubrirla.
Arte: Humberto Hernández
Modelo: Funiculí Funiculá
Traducir cada centímetro de tu espalda a nuestro idioma privado, atrapar los instantes de luz que generas, ser capaz de memorizar todas las idas y venidas que se nos van quedando sobre la piel, como huellas en la orilla. No nací sabiéndote, conociéndote; simplemente un día te encontré y descubrí que no había nada más en el exterior, que todo giraba en torno a ti. Por eso ahora trato de aprenderte como una necesidad vital: en la misma nube se dibujan juntos todos los tesoros que me ofreces de forma desinteresada y cada uno de mis intentos por ser mejor, por acercarme un poco más. No es algo a lo que me sienta obligada, forzada; simplemente quiero alejar los bordes y los límites que nos rodean, y que no nos crezcan malas hierbas al borde del camino que estamos construyendo. Tiéndeme la mano, abre las ventanas, mírame de frente y no necesitaremos ir dejando señales en las esquinas. Puedo recorrerte mil veces de norte a sur y en cada abrazo hallaría un nuevo milagro.
lunes, 23 de marzo de 2009
Señorita Demasiado II
No nos gusta pensar que casi todo lo que somos es fruto de la casualidad. Preferimos creer que hay algo que nos ha hecho estar aquí y ahora justo de este modo y en estas circunstancias, pensar que sólo lo que ocurre es posible y que todo lo que no fue no tenía razón de ser. Tu trabajo, tus amigos, tu familia, tus aficiones, tu forma de ver las cosas y hasta tu peinado, todo eso que te hace tal y como eres es tan sólo el resultado del azar. Sin embargo, a mí me gusta pensar en esto cuando me siento mal por cualquier motivo, y me reconforta saber que no tenemos la culpa de nada.
lunes, 19 de enero de 2009
Zombie 1/2
No le encuentro mucho sentido a nada y hay días en que particularmente sueño con ese sano objetivo de dominar al mundo para destruirlo, o tal vez con el día en que llegue ese meteorito que nos partirá la madre o que de una buena vez se derrumbe ese volcán de La Palma y provoque ese lindo tsunami que se llevara a la fregada casi toda la humanidad…
Pero como tres opciones no me bastan yo tengo una cuarta…creare un ejercito de zombies…por lo pronto ya tengo un elemento y medio para mi ejercito.
En realidad solo son desvarios de ociosidad de mi parte… y es el pretexto para mostrar la creatividad de un amigo muy amigo entre mis amigos…bueno exagero, en realidad es mas amigo de mi darkifresa y conocido mío…y en realidad los zombies son de mi pequeña.
Como sea, se me dio la gana exponer al mundo la creatividad de este master mejor conocido en los bajos mundo de Liondres , mas específicamente en San Miguel y colonias vecinas como el Bayo.
Su especialidad es moldear en plastilina, y punto mas a su favor…no ha tomado curso alguno, es bendecido por el arte y maldecido por su locura… o todo lo contrario?
martes, 13 de enero de 2009
Empieza el juego I
Parece que ha amanecido un nuevo día,
porque la noche era ya demasiado larga
y por un momento pensé que no volvería a amanecer.
Hoy he despertado y no recordaba nada. No sé nada más de mí de lo que tú sabes. Bueno sí. Lo que he ido descubriendo a lo largo del día. Pero para no estar en ventaja te lo escribiré aquí cuando tenga tiempo y ganas. Que no sé si será mucho o poco. Cómo saberlo, si no recuerdo en qué empleo mi tiempo y mi esfuerzo.No sé cómo ocurrió, obviamente si no recordaba nada tampoco podía recordar qué me había pasado para llegar a esta situación.Y lo curioso es que no he sentido nada al respecto.Ni rabia.Ni tristeza.Ni dolor.Ni siquiera me ha importado un poco.De hecho, no sé por qué tendría que sentir cualquier cosa.No sé si alegrarme de haber dejado en el olvido un pasado que lo merecía o si lamentar haber perdido recuerdos bellos.Lo que me doy cuenta es de que es mentira eso de que existan recuerdos inolvidables.Yo soy la prueba viviente de ello.Corregiré a cualquiera que oiga decir eso.Me he visto aqui sola en mi habitación y no sabía ni mi nombre y he comenzado a intentar recordar.Lo primero y más fácil es empezar a registrar mi casa.¿Mi casa?No sabía ni siquiera si vivía sola, en pareja o con mis padres.No sabía ni siquiera si mis padres vivían.Eso me ha puesto triste.He pensado que debía lamentar no recordar nada de mis padres y lo he visto lógico.Pero tampoco lo he sentido tanto como para llorar.
porque la noche era ya demasiado larga
y por un momento pensé que no volvería a amanecer.
Hoy he despertado y no recordaba nada. No sé nada más de mí de lo que tú sabes. Bueno sí. Lo que he ido descubriendo a lo largo del día. Pero para no estar en ventaja te lo escribiré aquí cuando tenga tiempo y ganas. Que no sé si será mucho o poco. Cómo saberlo, si no recuerdo en qué empleo mi tiempo y mi esfuerzo.No sé cómo ocurrió, obviamente si no recordaba nada tampoco podía recordar qué me había pasado para llegar a esta situación.Y lo curioso es que no he sentido nada al respecto.Ni rabia.Ni tristeza.Ni dolor.Ni siquiera me ha importado un poco.De hecho, no sé por qué tendría que sentir cualquier cosa.No sé si alegrarme de haber dejado en el olvido un pasado que lo merecía o si lamentar haber perdido recuerdos bellos.Lo que me doy cuenta es de que es mentira eso de que existan recuerdos inolvidables.Yo soy la prueba viviente de ello.Corregiré a cualquiera que oiga decir eso.Me he visto aqui sola en mi habitación y no sabía ni mi nombre y he comenzado a intentar recordar.Lo primero y más fácil es empezar a registrar mi casa.¿Mi casa?No sabía ni siquiera si vivía sola, en pareja o con mis padres.No sabía ni siquiera si mis padres vivían.Eso me ha puesto triste.He pensado que debía lamentar no recordar nada de mis padres y lo he visto lógico.Pero tampoco lo he sentido tanto como para llorar.
miércoles, 31 de diciembre de 2008
Señorita Demasiado III (piernas nuevas)
Ayer me encontré unas piernas en casa. No sé por dónde se colaron, supongo que por la ventana. Serían unas piernas trepadoras, de ésas que sirven para ir a la montaña o encaramarse a los árboles.
Eran unas piernas bastante femeninas, al verlas, me sorprendí un poco, pero agradecí que estuvieran depiladas. Al principio no sabía muy bien qué decirles, no acostumbro a hablar con las piernas. Con los pies sí, les digo: "pies, para qué los quiero. Pero bueno, yo no sabía cómo dirigirme a esas piernas.
"Diablos, pues no sabes cuánto se habla de nosotras", contestaron con orgullo, al verme dudosa. Pero no entendí muy bien a qué se referían. En serio, yo estaba más preocupada de qué podía servirles (imaginé que café no; sé que hay masajes de chocolate, a lo mejor les hubiera gustado, aunque en seguida lo pensé mejor, quién soy yo para darle masajes a esas piernas desconocidas e intrusas, y además, el chocolate engorda). De repente me dieron ganas de echarles cera caliente. O de echarlas, directamente. Al final me decidí a preguntarles:
"Bueno, ¿y dónde está la otra parte?".
Entonces me explicaron su historia. Resulta que estaban rodando un capítulo para una serie de dibujos animados. Algo habitual: el personaje tiene que huir, toma carrera, las piernas hacen el remolino a la vez que suena una melodía extraña e irreploducible (rollo: plitiploncplitiploncplitiplonc) y salen corriendo antes que la otra mitad del cuerpo. Se ve que, en la carrera, perdieron a la otra mitad.
"Pues tendríais que ir a buscarla", les dije, "sin piernas no vas a ninguna parte".
"Pero qué dices, elitista", me soltó una de las dos con una coz, "hoy en día hay un montón de sistemas para suplirnos".
"Además, ya no volverán los oscuros golondrinos a anidar en el jardín de esos sobacos", añadió la otra en plan patada voladora.
La cuestión es que las piernas están muy contentas de haberse independizado. Ahora pueden leer, hablar, correr, y hacer estiramientos siempre que quieran. Hoy se han pasado la tarde probándose mis zapatos y bailando en el comedor. Las voy a pescar cuando estén descuidadas y me las pondré. Al menos a estas rodillas no les tiemblan las piernas y me las voy a quedar…si señor, me lucirán de fábula.
Eran unas piernas bastante femeninas, al verlas, me sorprendí un poco, pero agradecí que estuvieran depiladas. Al principio no sabía muy bien qué decirles, no acostumbro a hablar con las piernas. Con los pies sí, les digo: "pies, para qué los quiero. Pero bueno, yo no sabía cómo dirigirme a esas piernas.
"Diablos, pues no sabes cuánto se habla de nosotras", contestaron con orgullo, al verme dudosa. Pero no entendí muy bien a qué se referían. En serio, yo estaba más preocupada de qué podía servirles (imaginé que café no; sé que hay masajes de chocolate, a lo mejor les hubiera gustado, aunque en seguida lo pensé mejor, quién soy yo para darle masajes a esas piernas desconocidas e intrusas, y además, el chocolate engorda). De repente me dieron ganas de echarles cera caliente. O de echarlas, directamente. Al final me decidí a preguntarles:
"Bueno, ¿y dónde está la otra parte?".
Entonces me explicaron su historia. Resulta que estaban rodando un capítulo para una serie de dibujos animados. Algo habitual: el personaje tiene que huir, toma carrera, las piernas hacen el remolino a la vez que suena una melodía extraña e irreploducible (rollo: plitiploncplitiploncplitiplonc) y salen corriendo antes que la otra mitad del cuerpo. Se ve que, en la carrera, perdieron a la otra mitad.
"Pues tendríais que ir a buscarla", les dije, "sin piernas no vas a ninguna parte".
"Pero qué dices, elitista", me soltó una de las dos con una coz, "hoy en día hay un montón de sistemas para suplirnos".
"Además, ya no volverán los oscuros golondrinos a anidar en el jardín de esos sobacos", añadió la otra en plan patada voladora.
La cuestión es que las piernas están muy contentas de haberse independizado. Ahora pueden leer, hablar, correr, y hacer estiramientos siempre que quieran. Hoy se han pasado la tarde probándose mis zapatos y bailando en el comedor. Las voy a pescar cuando estén descuidadas y me las pondré. Al menos a estas rodillas no les tiemblan las piernas y me las voy a quedar…si señor, me lucirán de fábula.
miércoles, 24 de diciembre de 2008
Señorita Demasiado I
¿Qué es lo que me mantiene en pie?
Mi darkifresa.El fuego. La forma mágica en que la música puede arrancarme una sonrisa o partirme por la mitad. La extraña luz iluminando las aceras al volver a casa por la noche; saber quién permanece cuando el agua ya cubre las rodillas.La sensación de alivio que recorre como pétalos mis venas cuando escucho alejarse la tormenta y celebro que sí, que esta vez he logrado sobrevivir. El brillo en la mirada de alguien que no me conoce pero sonríe al cruzarnos por la calle. Un puñado de fotos de la infancia que aparecen por arte de magia, nadie sabe muy bien de dónde, pero que tienen el mismo efecto que un camino hacia el sur.Aún conservo la energía de aquellos momentos; después el mundo se vino abajo y hubo que inventar nuevas escaleras de incendios como esta. El silencio denso y metálico un instante antes de echar a correr bajo la lluvia, que cae fría sobre los hombros desnudos. Sentirme acompañada, viva. Llegar, y después permanecer; por ese orden.Todo eso me mantiene en pie. Y apuesto a que no existe oscuridad capaz de hacerme caer, al menos mientras recuerde los motivos por los que una vez me levanté.
Me voy
Real padre mío, te pido disculpas.Pero si el casamiento es mío, quien decide soy yo. Sólo me casaré con quien yo quiera y cuando yo quiera. El príncipe es muy simpático, valiente y todo eso. Pero yo todavía quiero conocer el mundo. Hay muchas otras cosas que yo quiero saber. Eso de quedarse la vida entera encerrada en un castillo es muy bonito, pero he visto que afuera en los campos y en los bosques, hay muchas otras cosas.Yo hago mi propio cuento.Al día siguiente, la Princesa inició un largo viaje...
Dolor
Dolor bendito que purifica mi soberbia yme torna humilde ante la tempestad que sin piedadarrasa con raíces milenarias.Huracán de mano herida que al asirse, resquebraja el alma.Torbellino en danza loca que sin preguntar me toma de pareja, susurrando al aído palabras amorosas en compensación.Marejada que me revuelca uniendo el ego,en círculo imfimito de ola encabritada. Convirtiéndome en gota lastimera asida a cualquier roca que me brinde consuelo.Bendito dolor que redime, la injusticia de la visa en la vida y por la vida.Dolor puro, esencia de muerte, llévate la herrumbre, que apesta a vanidad, soberbia y gloria ajena.
Día a día
Cada día me busco. Me busco en los espejos cuando me miro. Me busco en los objetos de mi casa. Me busco en las cosas que hago y en las que dejo de hacer. Me busco en lo que me gusta y en lo que no. Me busco al despertar y al atardecer. Me busco sin descanso y sin resultado. Como todos hacemos. Pero otros tienen algo a que agarrarse. Los recuerdos. Eso de lo que yo carezco. Y en base a ellos se construyen cada día su propia imagen. Y se la creen, aunque puede ser tan falsa... Los recuerdos nos engañan. Olvidamos cosas que son importantes pero que las negamos porque nos desagradan y así vamos formándonos una idea equivocada de nosotros mismos. La que más nos conviene. Pienso que mi búsqueda puede ser más fiable. No habrá recuerdos que vengan a engañarme. No habrá mentiras aceptadas durante mucho tiempo. Sólo yo frente a mí misma. Y puede que lo que encuentre no me guste nada.
¿Te gusta a ti lo que encuentras cada día?
¿Te gusta a ti lo que encuentras cada día?
martes, 23 de diciembre de 2008
Aquí estoy
jueves, 11 de diciembre de 2008
Bettie Page
Sobre esta mujer se han escrito libros, ha sido personaje de cómic y servido de inspiración para crear otros (desde la novia de Rocketeer hasta Clara de Noche), ha salido en portadas de discos, ha rodado alguna película y su vida ha sido llevada al cine al menos en dos ocasiones… también fue una de las primeras chicas Playboy.
Pero que te puedo decir que no sepas ya de ella, y si no sabes pues ve a google.
El punto es que esta mujer abrió brecha, bendita sea por eso.
Descanse en paz… por siempre Bettie Page.
Pero que te puedo decir que no sepas ya de ella, y si no sabes pues ve a google.
El punto es que esta mujer abrió brecha, bendita sea por eso.
Descanse en paz… por siempre Bettie Page.
viernes, 28 de noviembre de 2008
Mi Darkifresa
Siempre te he dedicado algunas letras cada día de tu cumpleaños, ahora en tu cumple quince he tardado unos meses en escribirte, la verdad no se porque. Tal vez he estado asimilando el hecho de día a día te conviertes en toda una mujer. Por todos los dioses, la de cosas que me he estado preguntando, justo en estos ultimos meses empieza en verdad ah ponerse a prueba lo que te he ensañado y de repente me da miedo ser una pobre guía...pero bueno ambas sabemos que todo lo que te pase no es más que la consecuencia de tu madurez.
Lo que sí te digo, querida Tachy, es que a pesar de que te suene raro, la vida es ilimitado en sus oportunidades, algo tan inmenso que, pese a ese adjetivo aumentativo, es un único tren que para muy escasas veces en nuestra estación y hay que estar listo para cogerle antes de que parta y no vuelva a aparecer jamás.
Cuando te decidas a algo supongo que me darás la razón, sabrás en ese preciso momento lo verdaderamente importante que son tus deseos y que nadie deberá entrometerse en ellos. Nadie, mi pequeña, absolutamente nadie.
Tu decisiones son única y exclusivamente asuntos tuyo,y es por eso por lo que merece la pena arriesgarse sabiendo de antemano que hay consecuencias y no abandonarse a ellas es el verdadero riesgo, porque dejar todo sin concluir es como prostituir la propia vida.
Quizá aún no me comprendas del todo pero hemos tenido el tiempo suficiente como para madurar juntas, pero sé, y eso me consta al cien por cien, que somos demasiado iguales y que sabemos emocionarnos por las mismas cosas al tiempo que con una mirada. Tú y yo sabemos entendernos sin necesidad de palabras u otra clase de artificios.
Sabes que eres libre de hacer y sentir a tu antojo, libre para poder querer a quien te quiere y eso es algo que no tiene precio. Créeme, querida nena, el amor no tiene precio, o se da por las buenas y sin exigencias, o se rechaza de pleno. No admite medias tintas. Y espero que sepas diferenciarlo cuando la llama brote en tu corazón.Es un sentimiento que no admite confusión y, es algo que he averiguado a base de malas noches sin dormir.Pero aún así ten conciencia de que siempre que sepas estar con la persona acertada, voy a ser muy feliz por ti.
Te quiero hasta el infinito mi pequeña.
Lo que sí te digo, querida Tachy, es que a pesar de que te suene raro, la vida es ilimitado en sus oportunidades, algo tan inmenso que, pese a ese adjetivo aumentativo, es un único tren que para muy escasas veces en nuestra estación y hay que estar listo para cogerle antes de que parta y no vuelva a aparecer jamás.
Cuando te decidas a algo supongo que me darás la razón, sabrás en ese preciso momento lo verdaderamente importante que son tus deseos y que nadie deberá entrometerse en ellos. Nadie, mi pequeña, absolutamente nadie.
Tu decisiones son única y exclusivamente asuntos tuyo,y es por eso por lo que merece la pena arriesgarse sabiendo de antemano que hay consecuencias y no abandonarse a ellas es el verdadero riesgo, porque dejar todo sin concluir es como prostituir la propia vida.
Quizá aún no me comprendas del todo pero hemos tenido el tiempo suficiente como para madurar juntas, pero sé, y eso me consta al cien por cien, que somos demasiado iguales y que sabemos emocionarnos por las mismas cosas al tiempo que con una mirada. Tú y yo sabemos entendernos sin necesidad de palabras u otra clase de artificios.
Sabes que eres libre de hacer y sentir a tu antojo, libre para poder querer a quien te quiere y eso es algo que no tiene precio. Créeme, querida nena, el amor no tiene precio, o se da por las buenas y sin exigencias, o se rechaza de pleno. No admite medias tintas. Y espero que sepas diferenciarlo cuando la llama brote en tu corazón.Es un sentimiento que no admite confusión y, es algo que he averiguado a base de malas noches sin dormir.Pero aún así ten conciencia de que siempre que sepas estar con la persona acertada, voy a ser muy feliz por ti.
Te quiero hasta el infinito mi pequeña.
lunes, 30 de junio de 2008
lunes, 12 de mayo de 2008
El tiempo, ese viejo tramposo
Si hubiera de vivir
Los bastantes años como para verte,
Podría decir que te amé lo suficiente
Que envejecer es madurar
Ciertas posibilidades
Ejemplo de ello es nuestra muerte
O la suerte o el olvido en que caen ciertos objetos.
Sucede algo curioso:
Uno no vive realmente lo suficiente
Como para odiarse
Apenas pasa que nos sentimos
Estimados por nosotros mismos
Entonces, quisiera verte viejo
Y sentir lo mismo que siento ahora
Con este rubor en las mejillas
Con este temblor entre las piernas
... que vienen cuando te acercas
Si pudiera vivir lo necesario
Verte, escucharte
Contarte la piel y sus gemidos largos
Entonces apelaría a la muerte
Y te diría (y entenderías)
Que algo hubo sincero
-Sólo las cosas auténticas
Perduran a través del tiempo-
Ya vieja me daría cuenta
De quién de los que quise
Me quiso
Tengo en la memoria
Unos cuantos nombres y otros apellidos
Alguno de ellos se colarán al final
Para gritarme en el cerebro ajado:
¡Yo te quise!
Mis ojos se llenarán de nostalgia
La garganta se cerrará emocionada
Y mis artríticas manos de anciana
Alcanzaran a dibujar su figura
Los años, su paso, su historia
Los bastantes años como para verte,
Podría decir que te amé lo suficiente
Que envejecer es madurar
Ciertas posibilidades
Ejemplo de ello es nuestra muerte
O la suerte o el olvido en que caen ciertos objetos.
Sucede algo curioso:
Uno no vive realmente lo suficiente
Como para odiarse
Apenas pasa que nos sentimos
Estimados por nosotros mismos
Entonces, quisiera verte viejo
Y sentir lo mismo que siento ahora
Con este rubor en las mejillas
Con este temblor entre las piernas
... que vienen cuando te acercas
Si pudiera vivir lo necesario
Verte, escucharte
Contarte la piel y sus gemidos largos
Entonces apelaría a la muerte
Y te diría (y entenderías)
Que algo hubo sincero
-Sólo las cosas auténticas
Perduran a través del tiempo-
Ya vieja me daría cuenta
De quién de los que quise
Me quiso
Tengo en la memoria
Unos cuantos nombres y otros apellidos
Alguno de ellos se colarán al final
Para gritarme en el cerebro ajado:
¡Yo te quise!
Mis ojos se llenarán de nostalgia
La garganta se cerrará emocionada
Y mis artríticas manos de anciana
Alcanzaran a dibujar su figura
Los años, su paso, su historia
Delatarán a quines quise y me quisieron
Espero que tú y tu nombre
Estén presentes en esa exclusiva lista
Para cuando sea vieja.
Espero que tú y tu nombre
Estén presentes en esa exclusiva lista
Para cuando sea vieja.
miércoles, 19 de marzo de 2008
Día 9
Un animal tranquilo de su suerte es la serpiente.
No extraña la espesura, ha olvidado los usos del colmillo.
En la penumbra late su sonaja como la voz de un pájaro alejándose.
Se escurre, sigilosa, atenta a la impaciencia de cualquiera.
Si esto es el cielo-dice- hermanos míos, probemos la fruta del abismo.
Al pecar fundaremos de nuevo el paraíso...
Y me retiro al placer solitario de arrojar manzanas a la lluvia
domingo, 24 de febrero de 2008
Los lobos y el cordero
Dos lobitos que perseguían corderos atraparon un día un corderito y decidieron llevárselo a sus padres.
Pero en el camino el cordero les enseño trucos y resultó ser muy gracioso que cuando su padre decidió sacrificarlo le suplicaron que lo perdonara.
-¡De acuerdo! así lo alimentaremos bien y nos lo comeremos cuando esté más gordo.
Ataron el cordero a un gran árbol que estaba a un lado de la entrada de la cueva. Los lobitos se acostumbraron a jugar con él. El corderito sabía muchos juegos e inventaba otros que los lobitos lo destaron para que pudiera correr con ellos.
-No dejen que corra demasiado, eso endurece las piernas de los corderos
- decía el padre. Pero el corderito se hizo cada vez más fuerte.
Un verdadero lobezbo, pensó el padre, un día que el lanudo animal habia mordido a uno de sus hijos.
Y la madre lobo se enterbecía ante aquel pequeño granuja.
Los paseos de los tres amigos los llevaban cada vez más lejos.
Un día en que se había aventurado hasta el lindero del bosque, el cordero vio un rebaño de sus antiguos amigos. - No parecen divertirse mucho... y luego llevar a esos perros pegados a los talones en cuanto uno se desmanada un poco deve ser una pesadez.
Como había pensado en voz alta, uno de los lobitos le propuso: -¿ porqué no te acercas un poco y nos dices adónde piensan ir a pastar mañana?. El cordero se metió en en medio del rebaño y consiguió interesante información: el rebaño pasaría por el puente del Diablo, al amanecer del día siguiente. Los lobitos y sus padres se pasaron toda la noche preparando una trampa. A las primeras luces, el rebaño caminaba por el sendero que pasaba encima del puente. Los primeros animales cayeron por el agujero que habían hecho los hábiles carnívoros. El resto aterrorizado, retrocedió derribando al pastor. Así que los lobos sólo tuvieron que cargar con sus víctimas y llevarselas a su cueva. La maravillosa captura había convertido al cordero en el espía soñado.
Escuchaba las conversaciones de los pastores, de los carneros y de los perros. Y por la noche contaba los itinerarios que iban a seguir, los horarios de siesta de los pastores y de los perros, así los lobos trazaban su plan de ataque.
La abundancia reino en la cueva de los lobos, el refri estaba lleno y tenían lana en abundancia para tejer cálidas mantas. El invierno prometia ser muy feliz.
Pero los corderos acabaron sospechando algo: había un traidor en el rebaño.
Los ancianos corderos olvidaron sus viejos pleitos e idearon un plan para descubrir al traidor.
-Mañana iremos al parado cuadrado. dijeron en voz bien alta, aunque sabían muy bien que al día siguiente irían al prado puntiagudo. Y en efecto, desde el prado puntiagudo donde pastaban a la mañana siguiente, los corderos pudieron contemplar la trampa tendida por los lobos a la salida del prado cuadrado y vieron también al traidor. Los corderos más fuertes empujaron una roca que por poco mata a los lobosy su complice.
-¡Nos has tendido una tramapa falso hermano! - gritaron los lobos- Huye antes de que...
el cordero no esperó a oir el final: hechó a correr a través del bosque y al llegar cerca del rebaño comprendió que haría mucho mejor en seguir de largo. Así se convirtió en un cordero indigente. Amenazado por los lobos, rechazado por los suyos.
Los lobitos por su parte, ana vez pasados el susto y el enfado, hechaban mucho de menos a su compañero de juegos. Pero los lobos no están hechos para jugar con corderos...siempre acaba mal
Pero en el camino el cordero les enseño trucos y resultó ser muy gracioso que cuando su padre decidió sacrificarlo le suplicaron que lo perdonara.
-¡De acuerdo! así lo alimentaremos bien y nos lo comeremos cuando esté más gordo.
Ataron el cordero a un gran árbol que estaba a un lado de la entrada de la cueva. Los lobitos se acostumbraron a jugar con él. El corderito sabía muchos juegos e inventaba otros que los lobitos lo destaron para que pudiera correr con ellos.
-No dejen que corra demasiado, eso endurece las piernas de los corderos
- decía el padre. Pero el corderito se hizo cada vez más fuerte.
Un verdadero lobezbo, pensó el padre, un día que el lanudo animal habia mordido a uno de sus hijos.
Y la madre lobo se enterbecía ante aquel pequeño granuja.
Los paseos de los tres amigos los llevaban cada vez más lejos.
Un día en que se había aventurado hasta el lindero del bosque, el cordero vio un rebaño de sus antiguos amigos. - No parecen divertirse mucho... y luego llevar a esos perros pegados a los talones en cuanto uno se desmanada un poco deve ser una pesadez.
Como había pensado en voz alta, uno de los lobitos le propuso: -¿ porqué no te acercas un poco y nos dices adónde piensan ir a pastar mañana?. El cordero se metió en en medio del rebaño y consiguió interesante información: el rebaño pasaría por el puente del Diablo, al amanecer del día siguiente. Los lobitos y sus padres se pasaron toda la noche preparando una trampa. A las primeras luces, el rebaño caminaba por el sendero que pasaba encima del puente. Los primeros animales cayeron por el agujero que habían hecho los hábiles carnívoros. El resto aterrorizado, retrocedió derribando al pastor. Así que los lobos sólo tuvieron que cargar con sus víctimas y llevarselas a su cueva. La maravillosa captura había convertido al cordero en el espía soñado.
Escuchaba las conversaciones de los pastores, de los carneros y de los perros. Y por la noche contaba los itinerarios que iban a seguir, los horarios de siesta de los pastores y de los perros, así los lobos trazaban su plan de ataque.
La abundancia reino en la cueva de los lobos, el refri estaba lleno y tenían lana en abundancia para tejer cálidas mantas. El invierno prometia ser muy feliz.
Pero los corderos acabaron sospechando algo: había un traidor en el rebaño.
Los ancianos corderos olvidaron sus viejos pleitos e idearon un plan para descubrir al traidor.
-Mañana iremos al parado cuadrado. dijeron en voz bien alta, aunque sabían muy bien que al día siguiente irían al prado puntiagudo. Y en efecto, desde el prado puntiagudo donde pastaban a la mañana siguiente, los corderos pudieron contemplar la trampa tendida por los lobos a la salida del prado cuadrado y vieron también al traidor. Los corderos más fuertes empujaron una roca que por poco mata a los lobosy su complice.
-¡Nos has tendido una tramapa falso hermano! - gritaron los lobos- Huye antes de que...
el cordero no esperó a oir el final: hechó a correr a través del bosque y al llegar cerca del rebaño comprendió que haría mucho mejor en seguir de largo. Así se convirtió en un cordero indigente. Amenazado por los lobos, rechazado por los suyos.
Los lobitos por su parte, ana vez pasados el susto y el enfado, hechaban mucho de menos a su compañero de juegos. Pero los lobos no están hechos para jugar con corderos...siempre acaba mal
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