lunes, 23 de marzo de 2009

Señorita Demasiado II


No nos gusta pensar que casi todo lo que somos es fruto de la casualidad. Preferimos creer que hay algo que nos ha hecho estar aquí y ahora justo de este modo y en estas circunstancias, pensar que sólo lo que ocurre es posible y que todo lo que no fue no tenía razón de ser. Tu trabajo, tus amigos, tu familia, tus aficiones, tu forma de ver las cosas y hasta tu peinado, todo eso que te hace tal y como eres es tan sólo el resultado del azar. Sin embargo, a mí me gusta pensar en esto cuando me siento mal por cualquier motivo, y me reconforta saber que no tenemos la culpa de nada.

4 comentarios:

Kanda Mayhem dijo...

La filosofía referente a la razón de la existencia está tan trillada que cuesta saber cuál sería la hipótesis "correcta"... por eso prefiero pensar en mis propios intereses antes que en eso. Incluso cuando estoy triste prefiero asumir las consecuencias de mis actos. ¡Tengo que aprender a ser mayor!

Gracias por pasar. Parece que a la gente le gusta mi conejito... estoy pensando que podría hacer cómics o tiras sobre él.
¡Saludines!

CLICK CLICK... dijo...

Clap clap clap!

mün dijo...

... no tenemos la culpa ... realmente es reconfortante

CLICK CLICK... dijo...

Pero ya tienes la culpa de que te extrañe...